Delitos de odio

¿Qué es un delito de odio? ¿Qué es un incidente de homofobia, lesbofobia, bifobia y transfobia?

¿Qué es un delito de odio?

Según la definición de la OSCE un DELITO DE ODIO es cualquier infracción penal (contra las personas o propiedades), donde la víctima, el local o el objetivo se elija por su, real o percibida, conexión , simpatía, filiación, apoyo o pertenencia a algún grupo social (cuyos miembros tienen una característica común real o percibida, como su “raza”, origen nacional o étnico, lenguaje, color de piel, religión, sexo, edad, discapacidad intelectual o física, orientación sexual o identidad de género, etc…).

 

¿Qué es un incidente de homofobia, lesbofobia, bifobia y transfobia?

Un incidente de homofobia, lesbofobia, bifobia y transfobia (de ahora en adelante LGBTfobia) es un incidente de insultos, amenazas, ridiculización, robo/hurto, agresión física o denegación de un servicio que se considere motivado por los prejuicios o el odio a la orientación sexual o la identidad de género, según criterio o bien de la víctima o bien de un tercero, o de un testigo o alguna persona a la que la víctima le haya contado el incidente.

 

¿Por qué es importante denunciar cualquier incidente de homofobia, lesbofobia, bifobia y transfobia?

Según la Agencia de Derechos Fundamentales de la Unión Europea (FRA), entre el 60% y el 90% de las víctimas de delitos motivados por sentimientos de odio no denuncian su caso. Un factor importante de esta falta de denuncia es la tradicional creencia de la poca receptibilidad y a veces hasta hostilidad por parte de las fuerzas de seguridad que hacen que el número de denuncias formales sea mínimo.

Con la aprobación en el 2014 del “Protocolo de Actuación de las Fuerzas de Seguridad ante Delitos de Odio y conductas que vulneran las normas legales sobre Discriminación” y la realización de un Informe Anual sobre Delitos de Odio por parte del Ministerio del interior, ha aumentado la concienciación y la formación  de las fuerzas de seguridad en la gestión de la diversidad sexual y de los delitos de odio.

Según el Informe Anual sobre Delitos de Odio de 2015 sobre delitos de odio en España elaborado por el Ministerio del Interior afirma que las agresiones a personas LGTB han descendido en un año del 40% al 12% del total de casos registrados.

Este nuevo informe corrige por fin la recogida errónea de los 2 años anteriores (2013 y 2014) en los que el número de denuncias de víctimas de delitos de odio era mucho mayor y por causas diferentes a las que las organizaciones LGTB estaban recogiendo.

De hecho, este cambio en el criterio de recogida de los datos, que considera ahora más precisos que antes, corrige por fin la recogida errónea de  los 2 anteriores (2013 y 2014) en los que el número de denuncias de víctimas de delitos de odio era mucho mayor y por causas diferentes a las que las organizaciones LGTB estaban recogiendo. 

 Según muestra el informe, este año se han contabilizado 168 agresiones e incidentes  por esta causa, frente a las 513 de 2014. Este descenso no muestra realmente una disminución de los delitos, sino una forma diferente de catalogarlos.

Las denuncias referidas al colectivo LGTB ocupa un 4º lugar de denuncias de los delitos de odio en España. Un fenómeno que se explica al haber sido modificada la recogida de los datos por parte del Ministerio para la elaboración del informe.

Pero la cifra total de delitos de odio registrados en 2015 por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado fue de 1.324, lo que supone un aumento del 13% respecto a los datos registrado el año anterior. Según insiste el Ministerio, este aumento no significa que se haya producido realmente un incremento de estos delitos, ya que este año se contabilizan dos nuevos ámbitos que anteriormente no se computaban: la ideología, que he hecho en 2015 supuso el segundo mayor porcentaje de delitos de odio (308 casos, lo que supone un 23,8%) y el sexo o género (24 casos, un 1,8%).

El mayor porcentaje de delitos de odio fue el correspondiente a los casos de racismo y xenofobia (506, un 38,2% de los casos), seguido de la ideología (ya mencionada) y en tercer lugar la discapacidad (224 casos, un 16,9%). Los delitos por orientación sexual o identidad de género constituyen el cuarto grupo más numeroso, seguido de los delitos por creencias o prácticas religiosas (70, un 5,3%), por sexo o género, por aporofobia u odio a las personas “pobres” que se encuentran en situación de exclusión social (15 casos, un 1,1%) y por antisemitismo (9 casos, un 0,7%).

Es necesario que conozcamos la cantidad, el tipo y el alcance de los incidentes de LGBTfobia. Esto nos señalará qué zonas son las problemáticas y nos ayudará a mejorar la respuesta ante los incidentes de LGBTfobia.

Es necesario cambiar la tendencia actual y denunciar todos los incidentes de LGBTfobia, incluso aquellos que no parezcan graves.