CONSEJOS DE SEGURIDAD PARA LGBT
CRUISING (LIGAR EN ESPACIOS PÚBLICOS):
Mantener sexo al aire libre no es una actividad ilegal de acuerdo con la legislación española, aunque existen normativas locales que lo prohíben. En todo caso se deberá hacer de forma que no moleste a otros ciudadanos que usan los mismos espacios públicos. Los agentes de Policía pueden legalmente (Ley Orgánica 1/1992 de Seguridad Ciudadana) realizar “cacheos” preventivos en lugares públicos. Tienes la obligación de ir documentado y facilitarla cuando se te pida.
En las zonas de cruising se producen un número significativo de hurtos, robos con intimidación, agresiones, y en algún caso excepcional, incluso asesinato. A veces son los lugares elegidos por los grupos de personas con especial odio a LGBT (como neonazis,…) para insultar y agredir, sabiendo que la mayor parte de las veces las víctimas no denuncian por diversos motivos. Esto crea una sensación de impunidad a los delincuentes, y hace difícil erradicar estos comportamientos.
CONSEJOS: Si estás solo en un lugar aislado, vigila constantemente tu entorno. Procura no llevar encima objetos valiosos, ni dinero ni tarjetas ni documentación importante. En calles y caminos oscuros, es mejor caminar por el medio, ya que por los lados es más fácil ser atacados o sorprendidos. Si detectas cualquier persona o situación que te haga desconfiar, se prevenido: anota o memoriza los rasgos de las personas y las características de su vehículo (marca, modelo, color y número de matrícula). Y si te encuentras en una situación de peligro o amenaza, llama inmediatamente al 112 y sal del lugar alertando a otras personas que veas en peligro.
LIGAR POR INTERNET:
Antes de quedar con alguien por internet o por alguna app del móvil, intercambia teléfonos y otros datos. Acuerda lo que vais a hacer, dónde y fija los límites.
Si vas a quedar en un espacio público aislado inspecciona antes el entorno y los accesos. Permanece alerta ante cualquier persona o situación que te haga desconfiar. Lleva siempre a mano tu teléfono móvil para pedir ayuda en caso de necesidad.
Procura no dar tu dirección a desconocidos sin antes quedar en algún sitio concurrido, y siempre es mejor decir que no se vive solo. Cuidado con tus cosas de valor si vas a llevar a un desconocido a casa, y procura no dejarlo solo.
Si ves un perfil con una foto tuya o contenidos con pornografía infantil puedes denunciarlo ante la Brigada de Investigación Tecnológica de la Policía o el Grupo de Delitos Tecnológicos de la Guardia Civil
DERECHO DE ADMISIÓN
El derecho de admisión a servicios públicos ofrecidos por una administración pública o de servicios en el marco de actividades profesionales o empresariales realizadas por un particular están regulados por el Código Penal (Artículos 512 y 513) que prohíbe la discriminación en los mismos por la orientación sexual o identidad de género.
Frecuentemente la policía deriva indebidamente a los servicios de información al consumidor, cuando se prohíbe la entrada a un establecimiento por motivos discriminatorios. La praxis correcta de la policía es tramitar en cambio un procedimiento penal por delito contra los derechos fundamentales.
En el caso de las Administraciones Públicas se puede presentar denuncia ante el Defensor del Pueblo.
OUTING O REVELACIÓN PÚBLICA DE LA ORIENTACIÓN SEXUAL O IDENTIDAD DE GÉNERO
El Artículo 197 del Código Penal penaliza el descubrimiento y revelación de secretos vulnerando la intimidad de las víctimas, y esas penas se ven agravadas cuando tratan de la vida sexual o salud de las víctimas.
VIOLENCIA INTRAGÉNERO
Cualquier persona LGBT puede denunciar ante la Policía cuando es objeto de violencia por parte de su pareja. La actual Ley de Violencia de Género sólo se aplica a víctimas mujeres objeto de violencia por parte de sus parejas hombres, por lo que las parejas homosexuales no están contempladas. La citada Ley además de sancionar ejemplarmente estos comportamientos, ofrece una serie de recursos sociales a los que se pueden acoger las víctimas. Sin embargo en la mayoría de los Servicios de Atención a Víctimas de Violencia de Género gestionados por las administraciones públicas atienden sin problemas los casos de malos tratos entre parejas de lesbianas.